Este 20 de enero será recordado en la historia como el día en que tomó posesión de su cargo Barack Hussein Obama, el primer presidente negro. Con él llega la ilusión, la emoción, la esperanza, el compromiso de hacer política para todos. El nuevo presidente suscita una expectación como ningún otro lo había hecho, probablemente por la necesidad del mundo de creer en algo, en alguien que pueda cambiar las cosas, su eslogan electoral lo decía “yes, we can”, y todos creímos que podíamos. Ahora toca demostrarlo, se acabo el tiempo de las palabra para comenzar los hechos, asunto difícil teniendo en cuenta el panorama que le deja su antecesor el señor Bush, el que ha sido con toda seguridad el peor presidente de los Estados Unidos, que deja a su sucesor en herencia un horizonte sombrío. Probablemente toda esta confianza depositada en Barack Obama, sea precisamente la que nos haga desilusionarnos mas bien pronto que tarde, ojala y no sea así, pero como dice mi abuela, cuanto mas alto te subes mas grande es el porrazo.
Este 20 de enero también será recordado por muchos caravaqueños como el día en que el PSOE caravaqueño perdió su estandarte, a una política con letras mayúsculas que ha sabido demostrarlo día tras día, la mujer que con su trabajo y tesón colocó al Partido Socialista de Caravaca como una “la alternativa” clara y razonable, la mujer que trató de unir un partido fracturado históricamente, cuya fracción pagamos los que creemos en la política como algo distinto a permanecer en un sillón a toda costa, eso no es hacer política, sólo es el egoísmo de estar a cualquier precio, solo es el quítate tu para ponerme yo aunque esto suponga partir una agrupación en dos, aunque esto suponga perder una opción clara de gobernar. Con Carmen Porras se va la ilusión, la esperanza, el compromiso de hacer política para todos y la posibilidad de que las cosas cambien de una vez.
La pregunta lógica sería, ¿y porque se va?, -en la calle y en petit comité se dice que le han cortado la cabeza políticamente hablando y no seré yo quien niegue algo tan obvio-, la respuesta al porqué es sencilla, las personas que hoy dirigen el partido no cuentan con ella para el futuro, ni tampoco cuentan en el presente, ni con ella, ni con casi nadie del grupo municipal, digo casi nadie porque siempre hay quien busca un lugar en la lista. Por tanto cuando hay personas dentro de un partido que “quieren” un partido dividido porque así lo han demostrado, cuando NO hay voluntad por “sumar”, de colaborar de forma bilateral que no unilateral como los “nuevos” de la ejecutiva lo pretenden, cuando te enfrentas a este escenario de incongruencias es imposible seguir si te consideras una persona coherente y crees firmemente en los principios que tu partido representa. -Y digo esto siendo muy consciente de lo que significa.-
De todo esto ya iré hablando mas adelante, porque esta historia merece ser contada….